Vuelvo a Irán y a las aguas del Golfo Pérsico. Estas Navidades hemos tenido una buena dosis de maniobras militares iraníes, los ayatollahs han sacado a pasear su marina de guerra en una muestra de sacar pecho y su propaganda ha exhibido los misiles para atacar navíos. Todo ello para demostrar que presuntamente pueden cerrar el Estrecho de Ormuz a la navegación de petroleros. La amenaza se consumaría en caso de que la comunidad internacional embargara las exportaciones de crudo persa.
Muchos medios (con honradas excepciones como Foreign Policy) se han dejado llevar por la propaganda de Teherán, por el amarillismo o la ignorancia y han presentado a la maquinaria de guerra iraní como algo terrible y han puesto especial énfasis en los citados misiles. Sí, vale, las imágenes de los lanzamientos eran espectaculares. ¿Pero alguién se ha parado a pensar cómo se cerraría Ormuz?
Este interesante paper de una experta en la matería como es Caitling Talmadge deja claro que la clave en la estrategía iraní para cerrar Ormuz se basaría en las minas y no tanto en los misiles. En caso de conflicto la clave sería con que rapidez los buques (y en especial los submarinos) pueden minar sus aguas haciéndolas impracticables para la navegación. A partir de ahí, la marina de EEUU tendría que iniciar un largo proceso de desminado que podría prolongarse en caso realizarse bajo fuego de los mísiles, barcos y aviones iraníes.
Al parecer, la doctrina de guerra naval estadounidense no está muy desarrollada en el ámbito del desminado frente a una fuerza hostil en Ormuz. Es decir, la US Navy primero tendría que eliminar otras amenazas como las baterías de misiles, los aviones y los barcos de guerra iraníes, que podrían interrumpir o dificultar la labor de los dragaminas.
Talmadge pone el ejemplo de la Guerra del Golfo de 1991 cuando el ejército iraquí minó la costa de Kuwait, lo que desanimó a los marines para hacer un asalto anfibio. Tras el conflicto la marina estadounidense y sus aliados tardaron un mes en limpiar la zona, y eso que se hizo sin oposición. Este hecho da una idea de que se tardaría mucho tiempo en acabar de desminar Ormuz ante un posible cierre.
Para ir concluyendo, se puede decir que si se quiere neutralizar la amenaza iraní, la clave para la V Flota de EEUU sería detectar los buques y submarinos iraníes cuando empiecen a minar Ormuz para cerrarlo. Así se suprimiría la amenaza. En caso contrario, las fuerzas norteamericanas se acabarían imponiendo a las iraníes, pero habría que buscar alternativas al suministro porque podría bloquearse el paso de petroleros durante un tiempo considerable.
Tio, sencillo y fàcil de entender pa los paletos en temas estrategico militares de mi calibre….molt bé, molt bé!!!!
Salut canciller!
Gracias, y que los disfrutes Viatxans. De eso se trata que lo pueda entender todo el mundo, jejeje y no sólo los graduados en West Point.